El administrador del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) lanzó una advertencia contundente: los recortes masivos en ayuda internacional pueden desencadenar crisis globales sin precedentes.
Con países como Estados Unidos, Reino Unido y otras economías reduciendo su presupuesto de cooperación, miles de proyectos en salud, alimentación, educación y protección para refugiados están en riesgo.
Los más afectados serían los países del África Subsahariana, Yemen, Haití, Afganistán y Siria, donde millones dependen directamente de esa asistencia para sobrevivir.
El PNUD alerta que estos recortes podrían fomentar el colapso institucional, el resurgimiento de grupos extremistas y el incremento de flujos migratorios descontrolados. Las organizaciones internacionales llaman a una “solidaridad activa” para evitar un retroceso global en derechos humanos y desarrollo sostenible.



