París, Francia – Francia atraviesa un momento crucial tras la disolución de la Asamblea Nacional por decisión del presidente Emmanuel Macron, quien convocó elecciones anticipadas en respuesta al avance del partido ultraderechista Reagrupamiento Nacional en las recientes elecciones europeas.
La primera vuelta de las elecciones legislativas se llevará a cabo este domingo, y los sondeos reflejan una competencia reñida entre los partidos tradicionales, una izquierda unificada y la extrema derecha liderada por Marine Le Pen y su joven figura en ascenso, Jordan Bardella.
Macron ha hecho un llamado a la “movilización republicana”, alertando sobre el peligro del populismo, mientras los mercados financieros internacionales observan con incertidumbre el posible giro político en una de las economías más influyentes de Europa.
La sociedad francesa está profundamente polarizada: algunos temen que un gobierno de derecha radical debilite los derechos civiles, mientras otros apoyan medidas más estrictas en seguridad y migración.
El resultado de estas elecciones tendrá un impacto directo en la estabilidad política y social, especialmente en el contexto de los Juegos Olímpicos de París 2024, que ya imponen presión adicional sobre el gobierno.
